Agarré mis cosas y partí, lejos de aquí, donde el silencio y la tranquilidad reinan. Que lindo es ir por la carretera y ver a los hermosos animales a los costados, de a poco empiezo a divisar un pueblo. Lo recuerdo muy bien, ese es tú pueblo. Sin dejar pasar un minuto más te empiezo a buscar por todos lados, desesperado.
-Disculpe, ¿Ud. conoce a Camila Fuentes?
-ok. Gracias
-Disculpe caballero, ¿Ud. conoce a…?
-Bueno, de todas formas le doy gracias.
-Disculpe señora, ¿Conoce a una niña llamada Camila Fuentes?
-y ¿Me podría decir donde ubicarla?
- ok, no se preocupe, gracias.
-Niño, ¿Conoces a la Camila Fuentes?
-Pucha, ya no importa, gracias.
Tomé mis cosas, resignado por no encontrarla. Ya me marchaba, cuando la veo sonriente y radiante en la plaza de la Av. Colombia, iba con todas las ganas de acercarme y abrazarla. Pero en eso, se acerca mi primo repentinamente, apenas alcanzo a abrir los ojos, y me dice:
-oye, ¿Es verdad que te ganaste 50 lucas?
-Sí, ¿Por qué?
- ¿Me las podi prestar? Lo que pasa es que me voy con unas amigas a la playa y ando sin lucas.
-Pucha, ya toma…
*Esto lo escribi yo, pero la idea no fue mia, la idea fue de mantoi.
Deviste aver viajado, no te arrepentiras nunca
ResponderEliminar