martes, 29 de diciembre de 2009

Que belleza!


La vieja araucaria viendo todo desde las alturas, los girasoles moviendo su hermosa cara siempre hacia el sol, las margaritas siempre sonrientes y burlándose de los hongos que no son más que un estorbo, el pasto cubierto de gotas de agua es envidiado por los secos cactus, el sauce llorando porque no dejan vivir en paz al majestuoso roble, los claveles con pena porque son usados para recordar la muerte, las rosas alegres y orgullosas porque son una clara representación de amor , las algas deseosas de vivir en el desierto ya que nadie sabe que no aguantan más la respiración, el pino gruñe porque no quiere cargar más estúpidos adornos navideños, la enredadoras con intenciones de atrapar tu corazón, los tréboles en huelga por injusticia de hojas (todos quieren tener 4 y más), el trigo bailando al ritmo del viento y acariciando suavemente a un damasco que está solitario en medio de todo, el álamo molesto por el incesante picoteo de un ave y risueño a la vez por las cosquillas que le producen los gusanos que viven en su interior, las hortensias dándole vida con sus colores a este mundo gris, el cardenal trata de afirmarse de una reja, el aloe vera vive sufriendo por la perdida de sus extremidades, el musgo molestando a un calmado ciruelo, el llantén reproduciéndose por montones, el clavel del aire desearía vivir en las nubes, la palmera dando un espíritu caribeño donde todo es cemento, el nogal creando una fórmula para que sus frutos sean cada vez más duros, el dulce manzano trata de liberarse de la plaga de hormigas que lo ataca, el ají creando frutos picantísimos para que lo dejen de matar, el gran limonero quiere ser más pequeño porque no quiere que lo golpeen para extraer sus ácidos frutos, el olivo creando frutos exquisitos, el pequeño arbusto riéndose de las lechugas y las betarragas porque no pueden vivir en paz, las ortigas creando estrategias y planes para que más gente caiga en su dolorosa trampa, la rosa mosqueta alimentándose del frío, la zanahoria y las papas viviendo en una dimensión más abajo, el cochayuyo entregando un suave sabor a mar… visto desde otro punto de vista, natural de la naturaleza.

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