Todo es aburrido, todo es tan normal y típico.
En las calles de Santiago es normal ver a una madre con su hija rechazando el show ridículo de una persona típica.
En las calles de Santiago es normal ver a un hombre ignorando el show ridículo de una persona típica.
En las calles de Santiago es normal que las pinturas le presten atención al show ridículo de una persona típica.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario